En la gran circulación, la sangre sale del corazón a través de las arterias que van a irrigar los tejidos y órganos. Una vez utilizada, la sangre vuelve al corazón a través de las venas. La bomba para este movimiento de la sangre es el corazón.
En el caso de las piernas, la sangre tiene que subir en contra de la fuerza de la gravedad. Para ayudar este trabajo, las venas tienen una serie de válvulas que solo permiten que la sangre pase en una dirección (hacia el corazón).
Cuando las válvulas fallan, la sangre tiene dificultad para subir y tiende a quedarse en las piernas, dilatando las venas, lo que hace que mas válvulas fallen y termina produciendo una dilatación permanente de las venas. Estas son las Várices.
Las personas con Várices pueden tener venas marcadamente visibles, lo que les afecta estéticamente. Además se acompaña de síntomas como calambres, piernas pesadas, hinchazón y dolor.
Aquellos que trabajan por muchas horas de pie o sentados sufren más de este problema. Sumado a esto, la historia de Várices en la familia, muchas veces nos habla de una condición heredada, donde las venas son mas débiles y propensas a dilatarse.
Muchas veces los pacientes han tenido hernias y pie plano; en su mayoría debido a una debilidad en el colágeno.
Como en toda enfermedad, hay diferentes grados de severidad. Siendo el menor grado los síntomas como cansancio y piernas pesadas, sin venas visibles y el grado máximo la aparición de una Úlcera Varicosa.
Lo más importante es la consulta oportuna con un Cirujano Vascular, que es el único capacitado para evaluar y tratar el problema de forma integral.
En la consulta el Cirujano Vascular preguntará los elementos clave para el diagnóstico y examinará de forma específica la circulación. Como apoyo para diagnóstico el Eco Doppler venoso dará un mapa anatómico y detectará donde están fallando las válvulas. Esto es fundamental si queremos planificar una cirugía para eliminar las Várices.
Este examen, disponible en Clínica Bupa Santiago, toma cerca de media hora y no es doloroso ya que es un estudio no invasivo.
La cirugía de las Várices es una intervención segura. Muchas veces puede hacerse de forma ambulatoria o con una hospitalización breve.
Es importante que la cirugía sea mínimamente invasiva para que además sea estéticamente satisfactoria.
Para ello, en Clínica Bupa Santiago disponemos de Láser, Escleroterapia y Venaseal (pegamento de uso médico para Várices) que nos permiten eliminar las Várices a través de pequeñas punciones, sin grandes cicatrices en la piel.
Los Cirujanos Vasculares de Clínica Bupa cuentan con una amplia experiencia en el tratamiento de esta enfermedad.